domingo, 17 de noviembre de 2013

Ubaldo Matildo "El Pato" Fillol.



Este histórico arquero argentino, nacido en San Miguel del Monte (Buenos Aires) el 21 de Julio de 1950, se gano su prestigio mundial gracias a sus grandes paradas en River Plate y la Selección Argentina entre otros equipos.

Serio, sobrio, con una gran potencia de piernas y maestría en el mano a mano, debutó en la primera división Argentina en 1969 con Quilmes Atlético Club. Tras sorprender por su agilidad y espíritu ganador pasa a Racing Club en 1972, donde en un año ya es ídolo antes de recalar en River Plate, el club de sus amores y donde se consagró definitivamente consiguiendo el campeonato Nacional y Metropolitano en 1975 tras una sequía de 18 años del equipo del Rio de la Plata.

En Argentina existía la rivalidad entre los estilos de los que eran referencia, nuestro homenajeado y Hugo Orlando Gatti, que era todo espectáculo y El Pato que era sobriedad total, aunque yo diría que la sobriedad de los sudamericanos de la época era muy espectacular para los europeos. Su rivalidad fue histórica y traspasó los terrenos de juego. Además de protagonizar míticos clásicos River-Boca hubo mensajes del porque de sus apariciones en la selección.







Era un meta casi infranqueable en el mano a mano donde aguantaba en pie, achicando espacios y haciéndose grande de manera que el atacante no tenía más opción que errar la ocasión al chocar contra un muro. Su potencia de piernas era espectacular y le permitía llegar a todos los ángulos de la portería, además de alcanzar el balón por alto donde otros no llegaban a pesar de no tener una estatura notable (181 cms), sus reflejos hacían que en balones que ya se cantaban como gol acabaran siendo desviados por sus milagrosas manos.
Tras  años gloriosos en River tuvo que salir de su club para ser fichado a ultima hora por Argentinos Juniors cuyo entrenador era Ángel Labruna que siempre alabó a Fillol. Jugó 17 partidos y dejó un gran recuerdo.

Su siguiente equipo fue el Flamengo de Brasil en su primera salida de Argentina, un argentino en Brasil que fue querido por un rendimiento notable ya con 34 años.
Su salida de Brasil fue en 1985 para venir a España, a la aventura europea, al Atlético de Madrid. Allí demostró su calidad en una temporada, a pesar de sólo poder jugar 17 partidos por sufrir varias lesiones. A pesar de tener un contrato más largo decidió volver a Argentina donde lo hizo a Racing Club a vivir una segunda juventud, en 1988 ya con 38 años se le recuerdan partidos memorables en la primera edición de la Supercopa Sudamericana que ganó Racing eliminando en semifinales a su River y en la final a Cruceiro.


Su ultimo equipo fue Velez Sarsfield donde jugó ya con 40 años, defendiendo en su último partido la portería en el Monumental contra River que se jugaba el campeonato Apertura 1990. Ese día Fillol jugó uno de sus mejores partidos dándole el periódico El Gráfico un 10 de nota, atajó un penalti y Velez ganó, evitó que River ganara el campeonato y salió a hombros del que fue su estadio. Tras esto, como ya había meditado, dejó el fútbol activo.

Todo esto es en lo que se refiere a su carrera en los clubs pero en la selección fue y será recordado como el mejor, debutó en el mundial del 74 en Alemania cuando fue de tercer portero y en el último partido contra la Alemania Democrática el segundo portero Miguel Ángel Santoro renunció a jugar cuando el míster decidió quitar a Carnevalli. Cuajó un gran partido y comenzó a a participar con la albiceleste. Tuvo un problema con " el Flaco" Menotti, nombrado entrenador tras el mundial del 1974 para liderar a una gran Argentina para la Copa del Mundo el 78, en su propio país. Por un mal entendido, como dicen ambos, Fillol quedo excluido desde el 75 hasta el inicio del 78 y volvió gracias a una reconciliación que provocó la Revista El Gráfico.
Justo de tiempo para la gran cita mundial "El Pato" vuelve y consigue hacerse con la titularidad para convertirse en campeón de mundo y ser el mejor portero del mundial. Impresionó contra Polonia en Rosario, donde detuvo un penalty y las numerosas ocasiones de la selección polaca. En la final hace dos paradas salvadoras contra una gran Holanda, una de ellas de las más recordadas de todas las Copas del Mundo. Aquel mundial lo jugo con sus recordados buzos con el número 5 en la espalda ya que el reparto de dorsales se hacía por orden alfabético, por la misma razón llevó el 7 en el Mundial 82.


Jugó 58 partidos entre Mundiales, Copas América, Mundialitos y amistosos. El mundial de España en 1982 fue su tercer y último mundial ya que Carlos Bilardo no lo convocó para el de México 1986 tras jugar a un gran nivel toda la fase de clasificación.
Este mundial lo ganó Argentina con un gran Maradona.




Este mítico arquero, junto con sus muchos títulos tiene el gran mérito de tener el récord de penaltis parados junto con Gatti, pero no se le computan los parados con la selección, ni los de Copa América ni los que detuvo en las tandas de penaltis de la temporada 1988-89 en el campeonato argentino cuando los partidos empatados se debían de desempatar con lanzamientos desde los once metros. Así que su récord debería de ser aun mayor.


 Está considerado como el mejor portero argentino de todos los tiempos, por el periodismo el mejor de la historia de Sudamérica y desde el 2008 el premio al arquero menos batido del campeonato argentino lleva su nombre Ubaldo Fillol.